Ana protestó durante todo el camino, ya estaba cansada antes de empezar, rezongó, argumentó, expuso sus convicciones.. y con mucha energía pintó todo el rancho, delegó, hizo arte y contagió su sonrisa con el resto.
a media tarde del sábado, más agotada que nunca, dijo "aunque estés cansadísima, cuando estás en el Polonio enseguida te sentís feliz".
y todos confirmamos su teoría.
lunes, febrero 09, 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario